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jueves, 17 de julio de 2014

VENIMOS A OFRECER UN CORAZÓN. ("Uno" cada uno...)

Es una esperanza inmensa, es una ilusión de mejoramiento del ser humano.
Sí, en un mundo, -este mundo nuestro, el que "conocemos"- o, al que "pertenecemos" y creemos conocer, que alguien, -aunque sea un muñequito en un wallpaper- entregue, ¡Y POR AMOR! así, la mar de ilusionado y sin pedir, al menos, ni dinero ni algo material a cambio, y que  ella, su "Cardio-destinataria" esté hasta "cortadita" y avergonzada de coger lo que le están dando, es la gran esperanza, la gran ilusión que estaba yo esperando desde aquella última vez en que, años ha, nos lo dijo desde detrás su piano, con aquella letra tan conmovedora, el no menos conmovedor y genial cantautor argentino y de todos, el Gran Fito Páez: 

¿Quién dijo que todo está perdido? 
YO VENGO A OFRECER MI CORAZÓN
tanta sangre que se llevó el río,
YO VENGO A OFRECER MI CORAZÓN
No será tan fácil, ya sé qué pasa,
no será tan simple como pensaba,
como abrir el pecho y sacar el alma,
una cuchillada del amor.
Luna de los pobres siempre abierta,
YO VENGO A OFRECER MI CORAZÓN
como un documento inalterable 

YO VENGO A OFRECER MI CORAZÓN...."  

Eso: 
Fito Páez, de Argentina y DEL MUNDO... 




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